creixement personal

Más allá del crecimiento personal

Más allá del crecimiento personal

En algún momento comprendí que la vida no tenía más sentido que el que yo quisiera darle. Teniendo en cuenta la evidencia del cambio y la impermanencia, parecía un objetivo razonable proponerme averiguar quién era en realidad y desarrollarme como persona. Intuía, y aceptaba, que este proceso no se acabaría nunca y esto ya me parecía bien.

En los inicios, esperaba que este esfuerzo me ayudaría a alcanzar un estado de perfección que, con la neurosis de aquella época, me parecía deseable. Detrás de este planteamiento estaba la esperanza equivocada de que, de este modo, sería cada vez más reconocida y apreciada.

Poco a poco, no sin sufrimiento, se hizo evidente que construir una imagen de quien en realidad no era, suponía un esfuerzo inasumible. Y tuve que acompañarme en el duelo de aceptar que en realidad era más frágil, menos inteligente y capaz de lo que en realidad hubiera querido. La parte positiva de todo ello fue descubrir que este desencanto implicaba menos tensión y que, contra todo pronóstico, estaba más contenta. La vida se adaptaba más fácilmente a lo que iba descubriendo y el hecho cotidiano parecía más fluido y satisfactorio. Fui comprendiendo que, en realidad, esto del crecimiento personal implicaba adentrarse en las debilidades y vulnerabilidades y aceptar el «yo» que había negado y ocultado toda la vida.

La conexión con el cuerpo ha sido clave durante este período porque me ha permitido comprender los mensajes de las sensaciones. De qué habla la angustia o que le pasa al diafragma cuando me obligo a algo que en realidad no quiero. También me ha ayudado a abrir el corazón a las necesidades y mirar los deseos con compasión.

Con los compañeros de proceso, hemos compartido un montón de descubrimientos que han resultado útiles para ir viviendo el día a día: ¿De qué manera emociones y pensamientos se impulsan y dan cuerda?, ¿qué significa responsabilidad?,¿cuál es la diferencia entre pensar y saber algo?. ¿Qué es esto del carácter y para qué sirve?. ¿De qué va en realidad esto del amor? Y sobre todo, qué no soy «yo».

Parecería que finalmente los frutos habían llegado y era el momento de la recogida porque empezamos a vivir con suficiente espacio para acoger todo: las necesidades del niño que fuimos una vez, los sueños del adulto que nos acompañaba y también la mirada hacia una realidad que nos rodeaba y que tan a menudo nos parecía indescifrable.

Y cuando parecía que eso era todo, que podíamos asumir los altibajos vitales sin necesidad de añadir el plus de sufrimiento de antaño y que ya no nos perdíamos en laberintos de culpabilidad, sucedió algo nuevo: el ejercicio de conexión habitual del «qué pienso, qué siento, qué me está pasando» se volvió innecesario y extraño. Las cosas perdían importancia y «yo», también.

Ya no nos apetecía profundizar en las teorías de siempre y parecía más interesante ensimismarse y estar en paz que entretenernos con juicios interminables. Empezamos a disfrutar la Vida de la que formamos parte y a dejar de estar atentos al reconocimiento porque, ya somos lo que somos, y eso era más que suficiente.

Como si nos diluyéramos en algo más grande que tal vez ya no era «yo». O sí, pero no aquel cuerpo que me delimitaba ni aquel carácter que me definía.

Entonces supimos que el crecimiento continuaba. Y que quería ir más allá de la persona.

Más allá del crecimiento personal.

rosa montells Teràpia Gestalt Collbató

Autora

Rosa Montells

Terapeuta Gestalt con quince años de experiencia, miembro de la Asociación Española de Terapia Gestalt (AETG). Instructora de Movimiento Consciente Río Abierto. Profesora de Cocina Natural y Energética. Licenciada en Farmacia.

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